¡Hey, créanme! !Hay vida después del Lambrusco!

Con esta entrega comienza esta nueva columna de nuestro colaborador Rafael Ibarra, quien desde Monterrey escribe sus reflexiones en torno al vino y otros temas que le son habituales.

Por Rafa Ibarra

Dado que nuestro paladar es sumamente afecto al dulce, en México la mayoría de quienes empezamos a interesarnos en el vino buscamos primero uno que nos sepa dulcesito.

Y es que siendo nuestro país el nada halagador segundo lugar en consumo de refrescos de cola a nivel mundial, no es raro que esto suceda. Hasta podría decir que es lo más normal. Es por esto que muchos quienes en su primera vez probaron un vino seco —el típico cabernet sauvignon—, decidieron que el vino no les gustaba y generalizaron su opinión a todos los vinos del mundo. Mal inicio.

Pero ¿qué sucede cuando a esas mismas personas les das a probar un poco de vino Lambrusco? Me refiero a ese típico vino dulzón italiano, que se acostumbra tomar frío, tiene burbujas, es barato y se puede conseguir en cualquier tienda de supermercado.

La cara con expresión de desconfianza con que dieron el primer trago cambia a una sonrisa expresada con ojos y boca, seguida invariablemente de un «Mmm, ¡qué rico está este vino!». Lo siguiente es que te pregunten cómo se llama el vino y dónde lo compraste, porque lo querrán adquirir la próxima vez que vayan a hacer la despensa. Misión cumplida, hemos vinangelizado a alguien más. Claro, fue con Lambrusco, pero algo es algo.

No creo ser el único que haya hecho lo anterior cuando algún conocido te pide que le recomiendes un vino, y a la pregunta de «¿Qué acostumbras beber?» te contestan que cerveza, bebidas preparadas o refresco. ¡Toing! Como un resorte salta la sugerencia: «Lambrusco».

Digo, yo mismo empecé a aficionarme gracias a un vino rosado tipo Lambrusco que me gustó bastante y que a la distancia veo más como un refresco de uva que como un vino en forma. Lo importante es empezar, ¿no?

Pues sí, pero si realmente quiere uno seguir avanzando, adquiriendo más experiencia y mayor disfrute de la natural unión entre el vino y la comida, es necesario no quedarse estancado. Créanme, hay vida después del Lambrusco. Y mucha. Y es maravillosa.

Los invito a dejar la zona de confort de su apreciado vino dulzón al que están amarrados, para que empiecen a navegar entre tantos tipos de vinos que están ahí, listos para ser descubiertos. No tengan miedo.

Por supuesto, no les recomiendo dar el brinco hacia un Gran Reserva de Rioja o un potente cabernet sauvignon, pues el cambio sería demasiado brusco. Yo recomendaría empezar con un vino poco tánico, de cuerpo ligero y que no haya pasado por barrica, como un Beaujolais (se pronuncia ‘buyolé‘), al que puedes acompañar con una pizza, por ejemplo, pues la acidez de este vino  tinto francés va bien con el tomate.

Por cierto, a diferencia del Lambrusco, que se sirve a temperatura de entre 8° y 10° C, el Beaujolais se debe servir menos frío, entre 11° y 13° C, para disfrutarlo mejor.

Anda, atrévete, haz la prueba, no te arrepentirás. Y prepárate, porque después de romper la barrera del Lambrusco, ¡hay muchísimo qué aprender!

www.elmundoderafaibarra.com


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Comentarios

32 respuestas a «¡Hey, créanme! !Hay vida después del Lambrusco!»

  1. Arqui

    El vino lambrusco es un vino espumoso o gasificado?

  2. Pris

    Excelente artículo! muchas gracias =) yo también quiero iniciarme en degustar vinos.

  3. Marco

    Rafa:

    Precisamente hoy probé un vino de Villa Montefiori, para ser más precisos, un Merlot, de muy buen sabor, su aroma me recordó a mi padre, que tendía a disfrutar del buen vino.

    ¿Tendrás alguna sugerencia de un buen vino que pueda conseguir aquí en Monterrey?

    Saludos.

  4. Cesar

    Roberto L ha dado en el clavo, y no es exactamente porque el nuestro sea un país refresquero, que solo tome cosas dulces, por ejemplo, a que mexicano no le gusta la cerveza ?, y de dulce no tiene nada, mas bien el problema que veo es de temperatura, nuestro país, es uno de temperaturas cálidas en su mayoría, y lo que busca un mexicano al comer, o fiestear, son bebidas FRIAS, ese es el problema con los vinos buenos, los cabernet, los malbec, los europeos, burdeos, riojas y demás, la gente los quiere enfriar, por naturaleza, se quiere refrescar, y esos taninos dulces de un vino bueno, cuando el usuario los saca de la nevera a un grado o menos, jeje, esos taninos ya muerden de tan ásperos que quedan, lógico, el individuo en cuestión queda shockeado con su primera experiencia enofila, ah pero cuando pruebe el dulcesito lambrusco, se ira para ese lado, y eso, pues porque ese lo probo bien frio. Asi lo veo
    Gracias por el articulo, muy bueno.


  5. "Créanme, hay vida después del Lambrusco… " ….yes, and that's real Lambrusco! 🙂

    Authentic Lambrusco has a minimum alcohol percentage of 10.5% regardless of style (secco (dry) or amabile (semisweet)). The preferred style in Emilia is 'secco' which can have 0 or up to 15 g/l RS; i.e. it may be very dry or slightly off-dry. It depends on the producer's preference. Amabile, which can be semisweet or very sweet, is consumed with or instead of desserts in Emilia.

    Those "low alcohol Lambrusco versions" (3% to 10%) are not served in the region of Emilia. These are custom blends for exporters.

    For more information, please visit http://www.LambruscoDay.org .

    By the way, I enjoyed reading your post. Your commentary is very thoughtful and very balanced! Great job!

  6. Andres Ballazarte

    Saludos desde venezuela, acabo de leer el articulo y me parecio muy gracioso ya que me sucedio algo parecido, estoy interesado en iniciarme en disfrutar del vino, y el primero que probe fue un cabernet sauvignon, y mi reaccion fue…. uff esto del vino son 2 opciones o compre uno muy malo -no recuerdo el nombre de la bodega- o el vino no es para mi… recientemente probre un lambrusco y la verdad me gusto mucho y decidi darle una nueva oportunidad al vino jejeje…

  7. Andres Ballazarte

    Saludos desde venezuela, acabo de leer el articulo y me parecio muy gracioso ya que me sucedio algo parecido, estoy interesado en iniciarme en disfrutar del vino, y el primero que probe fue un cabernet sauvignon, y mi reaccion fue…. uff esto del vino son 2 opciones o compre uno muy malo -no recuerdo el nombre de la bodega- o el vino no es para mi… recientemente probre un lambrusco y la verdad me gusto mucho y decidi darle una nueva oportunidad al vino jejeje…
    aqui en Venezuela hay una fuerte presencia de vinos chilenos y algunos argentinos, por lo que te pido el favor de recomendarme deacuerdo a tu experiencia una secuencia vinicola por llamarla asi para ir evolucionando en este mundo

    saludos y muchas gracias

  8. Alma Rosa

    Hola vinisfera.com:

    Me interesa saber sobre los vinos mexicanos…consumo mucho el cavernet savignon..ya que soy de baja california..y siempre lo tengo a la mano…tambien el zinfandel rosado..me encanta.; tambien he probado el casillero del diablo, vino chileno…pero fuera de estos..me gustaria que me recomendaran otros. Saludos

    Alma Rosa.

    1. vinisferamx

      Hola Alma. Si vives en Baja, lo que te recomiendo es que te vayas un fin de semana a la ruta del vino y visites la mayor cantidad de vinícolas que puedas, ahí vas a aprender mucho y puedes comprar muy buenos vinos.

      Saludos y gracias por escribir!

    2. Mike

      Un 3v de la casa madero


  9. Definitivamente lo he visto en repetidas ocasiones, el Lambrusco es la introduccion al mundo del vino para aquellos que se rehusan en un inicio, sin embargo, hay quienes se casan con ese sabor dulson y gasificado, que ya no quieren dar un paso más a otros vinos mas complejos…lo ideal seria que en todo caso, si ya han otorgado su confianza y gusto a Ruinite.., probar tambien otras de sus variedades …el merlot por ejemplo lo tiene todo!
    Aun así, es aceptable que el Lambrusco ha hecho muy bien su función , es un vino definitivamente bebible y agradable para el paladar mexicano; yo no lo descartaria…sin embargo, para todos aquellos que no encuentran agradable el vino fuera del lambrusco.. los invitaria a probar un moscato por ejemplo e ir descubriendo nuevas variedades que resultaran agradables de igual manera a su paladar.
    Enjoy!!

  10. Fernando Dïaz Abrego

    Hola Rafa pues que interesante leer historias y anécdotas del inicio en la carrera del vino, yo apenas comienzo a probarlos y pues creo que el Lambrusco es una buena opción por los comentarios que dicen los amigos del foro, respecto al comentario de Mónica en lugar de hacerte una crítica lo único que logro fue hacer evidente su envidia y frustración, pues en nada participa con respecto al tema del que se esta hablando. Yo te felicito y te deseo lo mejor. Dios te bendiga

  11. Fernando Morales

    Me gusto este artiuculo, por que creo que es una ralidad que encontramos a diario, llegar a una reunion de amigos o familiares, encontrarnos con alguien que llegue con su botella de lambrusco, diciendote que un vinito para empezar, o que ? tu opcion es decir bueno me sirves poquito, o sacar tu botella de vino de tu preferencia y decir gracias con esto estoy bien,, sabemos que hace falta cultura en la cuestion de vino, yo me empece aficionar por el vino probando vinos un poco potentes, cuando llegue al lambrusco fue hace poco por lo que mi experiencia fue distinta, no quiere decir mala, me gusta el lambrusco, creo que hay momentos para tomarlo, pero al final es mas sencillo llegar con tu botella de un vino que a ti te guste y decir salud, acompañado de todos con su lambrusco, lo dijo por experiencia, Saluddd
    A quiero Ganarme Vinturi, por que quiero tener esa experiencia de tomar el vino, oxigenidito y seguir juntando mis gagets, saludos

  12. Dolo

    Rafa..

    Hola!!

    Esta padre tu articulo, y si definitivamente hay vida despues del lambrusco que digo vida..un mundo intergalatico que hay que descubrir y que nunca se acaba es lo mas chido..

    Contribuiremos con eso…

    Slds.


    1. ¡Esa es la actitud Dolo!

      Saludos.

  13. Monica Román

    Lamentable que un sitio tan profesional como vinisfera, incluyan columnas de un tipo de barato, vendido, borrego y que no sabe nada de vinos. Realmente pueden confiar en este señor que lo único que sabe hacer es idolatrar a todos para abrirse puertas?


    1. Hola Mónica. Felicidades, eres la primera que me ataca en este foro que amablemente Vinísfera.com me ha abierto. Es irónico que digas que este portal es profesional -y realmente lo es- y al mismo tiempo insinues que uso alguna táctica para abrirme puertas. Creo que te estás contradiciendo, pero es típico de gente que se expresa sin fundamentos, ya estoy acostumbrado a leer ese tipo de ataques, digo, de ‘críticas’.

      Otra cosa cursiosa es que dice que me dedico a idolatrar a todos. ¡Ja ja ja! ¡Qué risa! Lo gracioso es que si a mí me gusta un vino que a tí te gusta, no dices nada. Pero si me gusta uno que a tí no te gusta, estoy comprado. Y si no me gusta uno que a tí si te gusta, estoy comprado también. ¡Ja ja ja! A estas alturas esto ya en vez de coraje, me causa risa. Y un poco de lastimita por gente como tú.

      En fin Mónica, esto es un foro abierto, y espero que sea usado de manera inteligente, con argumentos, no con ataques infundados.

      Vinísfera.com tiene muchos temas disponibles por si no te gustan mis opiniones. Eres libre de continuar tu camino.


    2. Hola Mónica,

      Primero que nada muchas gracias por darte el tiempo de escribir, y por tu opinión sobre vinísfera.com

      Segundo, este es un foro abierto, donde le daremos espacio en forma de columna a quien demuestre pasión por el vino y compromiso de colaborar; aquí hay lugar para expertos y para los que no son, el mismo Rafa lo ha expresado en su blog: «yo no soy ningún experto». La idea de este espacio es que gente, como Rafa, que tiene un verdadero interés en el tema, pueda compartir su experiencia con el resto del público que poco a poco se va metiendo en el mundo del vino. Qué bueno que no te gusten sus opiniones, así es como una plática se hace sabrosa, lo único que me gustaría es que no fuera una crítica infundada; en cambio que fuera un debate de ideas. Si no te gusta lo que dice debátelo con argumentos sólidos, por mí, destrúyelo, pero con argumentos. Si no te cae bien Rafa creo que esa discusión pues no va aquí, irá en otro lado quizá.

      En serio muchas gracias por escribir, ojalá y te des el tiempo de opinar en más artículos, con crítica seria y fundamentada, sólo así podremos mejorar este espacio.

      Carlos Valenzuela
      Vinísfera.com


    3. Aceptemos por un momento que Rafa Ibarra no sabe nada de vinos, Mónica y que es todo lo que dices que es. Aún así, leyendo el artículo no encuentro nada que sea una burrada, una falacia o una declaración que favorezca a alguna marca en particular. Al menos hasta donde puedo entender del tema.
      Una de dos: o tú ves mucho más al leerlo o de plano no leíste el artículo y simplemente al leer el nombre de Rafa «compartes» lo que dices que sabes de él.
      Una pregunta, si es así: ¿estás al pendiente de dónde publica Rafa para entrar a dejar tu comentario ilustrador? Porque a como veo, cada vez más medios invitan a Rafa a colaborar. Suerte en la empresa.

  14. consuelo infante de dalvai

    Estimido Rafa

    Con cierta regularidad visito tu blog y te felicito por tus colaboraciones en Vinìsfera.
    Me gustaria compartirte lo siguiente, definitivamente el Lambrusco no es para nada un gran vino italiano como bien apuntas es un vino con el cual muchos se inician dentre de este campo.
    Dentro de Emilia Romagna, donde se elabora la mayor parte de estos , existe la tipologia seca y sobre todo si la botella te indica la variedad tal como Labrusco Salamino, Lambrusco di Sorbara o bien Lambrusco di Castelvetro se esta ante decentes representantes del mismo, pero raras ocasiones se encuentran en Monterrey.
    Si mi memoria no me falla DOC ITALIA, maneja uno de ellos.
    Por otro lado los Lambruso secos, son muy socorridos en dicha zona ya que con su efervescencia limpian el paladar de, embutidos, quesos y preparaciones tipicas de esta region conocoda como Emilia La Grassa.

    Saludos y èxito en tu columna
    Consuelo Infante de Dalvai


    1. Hola Consuelo. Gracias por traer a colación el tema del Lambrusco seco, que como bien apuntas, ni por asomo es tan fácil de conseguir como el vino dulzón al que hago referencia en la nota. Y creo que no sería bien recibido por todos los que se inician con el vino. Me gustaría probar uno seco. Ya lo puse en la lista de próximas compras.

      Saludos cordiales.

  15. Carlos Jaime

    Hola Rafa

    Buena invitación a pasar más allá del Lambrusco, que por cierto no he probado, pero sí, más de una vez que he llegado con una botella de tinto a una reunión donde pulule la cerveza, me han preguntado si he probado el Lambrusco Ruinite.

    Yo probé por primera vez el tinto en el Valle de Napa, por allá en el 2002 y después de 3 días de trabajo y cenas donde dejábamos los manteles «tintos», quedé prendado del vino. Tal vez por eso no pasé por el Lambrusco.

    Saludos


    1. Qué tal Carlos. Definitivamente tienen una gran ventaja ustedes que viven tan cerca de la frontera con California. ¡Aprovéchenla!

      Sobre el Lambrusco, pues quizás sólo como curiosidad conviene que los pruebes, pa’ que no te cuenten y puedas decir: «Aaaah, a esto sabe el Lambrusco». Y ya.

      Saludos.

  16. Roberto L

    Malvado, jejeje. ¿Qué tienes en contra de los vinillos dulces, burbujeantes e informales como para considerarlos «refrescos de uva»? Ok, yo aun sigo estancado en los Borgoñas tintos (aunque ahora que lo pienso, es un bonito lugar para seguir disfrutando un rato del panorama en lo que mis papilas y bulbo nasal retoman el ritmo); y quiza haya sido iniciado con un Merlot Argentino por un Maestro que insistía en la importancia de aprender a apreciar el vino; belleza de la uva y regalo de mi antepasado al mundo (segun él); pero no niego que uno de los pocos placeres que tiene la vida como para no saltar de un edificio en la época de calor; está en subirme a la azotéa con una botella de Asti, sentarme a la sombra del tinaco y mirar como sigue tostandose la ciudad mientras mi nariz se llena de aromas de durazno y uvas de mesa; y dudo mucho que mi afición a este regalo del Piamonte se convierta en algo cuposo con el tiempo.

    Sin embargo, estóy de acuerdo con lo necesario que es tener estas puertas amplias para nuestro refresquera patria. Asti nunca me ha fallado, pero supongo que tendré que añadir el lambrusco frizzante (o spumante?) a mi maletín de «prueba el vino o muere». Desde aquí levanto mi vasito O con aroma medio pinotesco y brindo por los vinos espumosos, dulces, frutales y casi refrescosos mas que refrescantes. Apoyo el comentario: Si tienes el interés, prueba varios de los distintos matices y colores de este rojizo-blanquecino arcoíris al que llamamos vino; pero si te gusta el Lambrusco, lo disfrutas y quieres dormir un buen rato allí; solo disfruta, que de esto se trata el vino. El gusto se rompe en géneros y la gloria enológica de alguien, es posible que sea el Romana’s Punch de otro.

    PD: Queso y Padre Kino. ¡Que padre vino!, jajajaja, mi maestro nos regañaba por tomarlo, pero que hacer, a veces el $ falta y la sed…la sed siempre llega.


    1. Hola Roberto L. ¿Borgoñas tintos? Oye, pues estás muy bien estacionado, je je je. Yo quiero estancarme un rato en esa área, que es amplia y muy variada.

      No tengo nada con los vinos dulces, burbujeantes e informales, pues en ocasiones son el vino indicado para cierta situación. La idea es motivar a la raza a experimentar más, a que se aventuren al mundo de los vinos secos.

      Y el Padre Kino, je je je. Es todo un ícono que creo que nos va a durar todavía muchos años.

      Saludos.


  17. Quihubo, Rafa (¡crece la pseudo fama!),
    Bueno, entonces yo no tuve tan mal inicio, porque no conozco el mentado Lambrusco, pero como sabes, entre mi adolescencia y temprana adultez le pegué con fruición al Padre Kino cuando no quería tomar cheve. Pero ya cerca de los 30 descubrí el Cabernet Sauvignon durante una visita a Santo Tomás, en Ensenada y quedé enganchado. Por cierto, aborrezco las bebidas alcohólicas dulces. Ahora que lo pienso, no me gustan las bebidas dulces en general, excepto el jugo de naranja, el de piña y el root beer.
    ¡Salud!


    1. «Padre Kino, ¡qué padre vino!». Ah, qué bellos aquellos años ochentas, ¿no? Ja ja ja. ¿Y con cuál era la fruición más fuerte: con el blanco o con el tinto? ¿O nunca has sido racista ni en vinos?

      Creo que el Padre Kino sirve como vinito para picnic, y está un paso adelante del Lambrusco. Digamos que empezaste un escalón más arriba. Lo bueno es que le has seguido, y hasta el Único 2005 de Santo Tomás ya te has zumbado, yo te vi.

      Saludos.


    2. Lo que son las cosas: acabo de descubrir un Lambrusco en mi refrigerador. Resulta que hace tiempo mi suegra lo compró y lo trajo a la casa, pero ahí se quedó y yo nomás veía la botella en el estante del fondo pero creía que era una salsa o un vinagre exótico.
      Habrá que darle mate ahora que ya empieza el calorcito.
      Y del Padre Kuino, mi paladar era ciego: blanco y/o tinto, ¡pa’dentro!


    3. Ja ja ja. Te digo Joel. Tenías un Lambrusco «durmiendo» en tu refri y tú ni en cuenta, ja ja ja. Lo gracioso hubiera sido verte echándole este vino a tu ensalada pensando que era aderezo, ja ja ja. Bueno, pues ya nos contarás qué te pareció.

      ¡Salud!


    4. Misión cumplida. Ni tan dulce, hasta éso y combinó muy bien con un sandwich de chorizo sinaloense con cheddar suave, lechuga y aguacate, en pan de centeno.
      Buscaré de todos modos esos secos.
      Salud.


  18. Hola Rafa,
    Pues yo me inicié en el vino gracias a mi hermano mayor, quien de joven trabajaba en una licorería y me daba a probar vinos de México, España y Estados Unidos.

    Salud!!!…os desde Mexicali
    Miguel


    1. Qué tal Miguel. No puedo más que decirte: ¡suertudo! Qué padre que tuviste como mentor a tu hermano para entrar en el mundo del vino. Y mira lo bien que te ha ido, eh.

      Un abrazo y cuídense allá en Mexicali, con los temblores.

      Saludos.